reproduce su película inmortal
en los espejos.
La cinta se fragmenta a cada paso
y se barajan los episodios.
Los actores son siempre distintos.
Tú y yo actores anónimos
un día pasaremos ante el objetivo.
La calle llena el cuarto.
Los espejos acuarios
fluyen sus aguas turbias.
Encenderemos las baterias.
El cuarto se va por los espejos.
A toda luz mis palabras-reflectores
proyectan un film sentimental.
Poema escrito entre 1917-1936 por Lucía Sánchez Saornil
No hay comentarios:
Publicar un comentario