a los que orbitan

un proyecto en forma de libro... una selección de textos agrupados... e ilustrados...
el desorden de un blog... las órbitas paralelas...
a los que orbitan...

otras órbitas

Platja del Far de Sant Cristòfol | Vilanova i la Geltrú (17.12.2011)

Caspar David Friedrich "Monje junto al mar" (1808 - 1810)
Óleo sobre lienzo. 110 x 171,5 cm.
Berlín, Nationalgalerie, Staatliche Museen zu Berlin-Preußischer Kulturbesitz.

cita

"Siguiendo la melodía como se lee un papel al viento, a Hans le sucedió algo infrecuente: sintió cómo sentía, se contempló emocionándose. Su oído atendía porque el organillo sonaba, el organillo sonaba porque su oído atendía. Más que tocar, a Hans le pareció que el viejo hacía memoria. Con una mano en el aire, los dedos ateridos, movía la manivela y la cola del perro, la plaza, la veleta, la luz, el mediodía giraban sin interrupción, porque cuando la melodía rozaba su final la mano relojera del organillero hacía no una pausa, ni siquiera un silencio, apenas una rasgadura en un manto, le daba la vuelta y la música volvía a comenzar, y todo seguía girando, y ya no hacía frío".
El Viajero del Siglo ( 2009) | Andrés Neuman

monomanías y sinopsis

el hombre se arrepiente de algo inconcreto que es incapaz de definir por mucho que se esfuerza en recordar. Toda la lógica está en su sitio, es otra cosa, algo periférico lo que no le deja en paz.
Piensa que los contornos los límites de la lógica están rodeados por los instintos. Debe ser eso, se dice. Pero en el instante en que piensa en ello lo atrae al terreno lógico y se desvanece su esencia.
Vuelve a quedarse como antes, atrapado en un contorno un límite.
Sin definición se hace complicado el arrepentimiento lógico. Y el periférico resulta demasiado raro de gestionar.

cita

imágenes de iván

"El otoño se fue instalando calladamente. Con el paso de los días, tenía la sensación de que, poco a poco, su cuerpo se iba volviendo transparente. Se esforzó en pensar lo mínimo. Pero no pensar en nada era imposible. Cuando se produce un vacío, siempre hay algo que lo llena."
1Q84 (libro 3) | Haruki Murakami

sueños de syl

Sueño Hiperbólico
-¿ Y usted qué desea?
-¿Yo?, ¿sabe una cosa?, cuando la miro a usted, deseo poseer a todas las mujeres del mundo.

cita

"El Cuco común (Cuculus canorus) es conocido por su reclamo típico y su comportamiento reproductivo. La hembra coloca su huevo en un nido ajeno, cuyos propietarios lo incuban. Existen entre 50 y 100 clases de aves hospedadoras reconocidas, frecuentemente se trata de la Lavandera blanca y del Carricero común. También puede parasitar los nidos de la Curruca, el Carricerín, el Petirrojo, la Collalba, el Ruiseñor o la Tarabilla. Justo después de salir del huevo, el polluelo arroja los demás huevos del nido."
Aves de Europa (2008) | Volker Dierschke

monomanías y sinopsis

las cosas no son nuevas de repente. Es la actitud, siempre es la actitud (el poder o el saber lavarse los ojos para volver a mirar todo aquello que se repite ante nosotros desde siempre y para siempre) la que nos permite multiplicarnos tantas veces como queramos (ser nuevos cada año, cada mes, cada día, cada hora). Las cosas en sí son viejas, son pura historia.

cita

"Todo el mundo en esta mesa está roto en pedazos que no podrán juntarse, pedazos que no tienen nada que ver unos con otros, como si todos ellos procedieran de diferentes puzles, todos mezclados dentro de una misma caja de manera descuidada por una dependienta de una tienda de caridad o de cualquier otro lugar donde los puzles van a morir. Excepto por el hecho de que los puzles no mueren."
Accidental (2005) | Ali Smith

sueños de syl

De Caza
- Cógelo, venga, no así no, bestia, que lo estripas, tonto. Mira, mira cómo lo hago yo.
La niña se acerca con cuidado al saltamontes, se pone en cuclillas aguantando la respiración, mira con atención al animal, y con un movimiento rápido, lo atrapa, sujetando suavemente las alas del insecto con el dedo índice y el pulgar de su mano derecha. Es entonces, cuando sonríe a su amigo.
- ¿Ves? Es muy fácil.
El saltamontes hace aspavientos con sus patas en su afán de liberarse y la niña siente cosquillas en la palma de su mano.
- No puedes cogerlo con la mano porque si no siempre se escapa, sus saltos son rápidos y no podrías agarrarlo.
La niña observa al animal, saca del bolsillo de sus calzonas una bolsa de pipas vacía y mete en ella al saltamontes, que apenas tiene espacio para frotar sus patas traseras con el cuerpo para emitir un canto de auxilio.
- Se va a morir, no puede respirar...
- Ay, no seas agonía, pues si se muere, luego lo enterramos. Es lo que siempre hacemos mi primo y yo. El próximo que veamos lo coges tú. A ver si eres capaz, ya sabes, sólo tienes que acercarte despacio, quedarte quieto muy cerca de él, y cuando veas que lleva un rato sin moverse, entonces, ¡zas! lo coges por detrás, siempre por las alas, para que no escape.
La niña mira a su amigo, esperando que asienta, que muestre sus mismas ganas.
- No sé, parece difícil...
-¡ Qué va, anda, no seas capullo! A mi al principio me pasaba lo mismo, pero ya no se me escapa ninguno. ¡Mira! ¡allí hay uno! ¡te toca, venga!

monomanías y sinopsis

imagen de silvia

te asomas un día a un espejo de piel y te devuelve tus propias preguntas de manera inmediata, simultánea. Es tan extraña la ausencia de espacio que deseas, por un instante, que se detenga. Detenerte tú. Pero es una experiencia tan asombrosa que divides tu deseo en dos extremos como de primavera y margarita deshojada.
Quieres detenerte un momento ante el espejo para facilitarte el entendimiento, terminar de asimilar la situación y poder seguir un rato más; aunque sabes que si emborronas la superficie, que si apartas la mirada, romperás el equilibrio encontrado.
Como todo espejo, era de frágil consistencia de todos modos.
Luego queda un brillo, como lo contrario a una mancha, que atestigua tus interrogantes duplicados.
Era la piel exacta.

cita

"Por fin está ahí, ante nosotros, ese tesoro que con tanto afán hemos buscado, y que ahora resplandece, centellea. Y a pesar de todo, seguimos dudando, no nos atrevemos a creerlo; nos quedamos deslumbrados, como si acabáramos de pasar de las tinieblas a la luz."
Madame Bovary (1857) | Gustave Flaubert

cita

"Bajé la cabeza porque no sabía qué hacer ni qué decir, y pensé que tenía que estrujar la tristeza, hacerla pequeña enseguida para que no me vuelva, para que no esté ni un minuto más corriéndome por las venas y dándome vueltas."
La Plaza del Diamante | Mercè Rodoreda

sueños de syl

imagen de iván

La lengua de uno circunda el labio superior del otro, brazos entrelazados y manos torpes, ansiosas, que agarran la carne bajo la ropa en la noche oscura, en el silencio de un cielo sin estrellas que les regala, con empeño, una suave lluvia que pronto les empapa. Corren a guarecerse mientras siguen besándose, aferrados a minutos que se les escapan, no queriendo perderse ningún recoveco, ningún rincón por acariciar antes de que la noche acabe, de que los minutos sean horas que huyan de ese presente.

cita

"El ruido de la ciudad parece haber quedado atrás, amortiguado. Me detengo a contemplar el juego de las nubes en el cielo, una procesión de manchas alargadas, que viajan con parsimonia hacia el oeste. La luz ha adquirido una coloración intensa, de un azul metálico, que se adhiere con precisión al contorno de los edificios. En el vestíbulo del MET, de frente, a lo lejos, colgados de las paredes, reconozco los Chagall, dos telas gigantescas pobladas de seres irreales que flotan ingrávidos en una espacio imposible".
Llámame Brooklyn (2006) | Eduardo Lago

monomanías y sinopsis

cómo crear países
Aunque primero dibuja la línea con la mirada, con la cabeza entera en movimiento, decide que es mejor dejar constancia del acto. Saca un papel en blanco de la estantería, lo pone sobre la mesa de madera y ajusta el borde para que la parte inferior quede paralela al borde de la mesa. Escoge un lápiz de punta blanda del bote, al final cerca de la pared, casi tiene que estirarse para alcanzarlo. Dibuja una línea que cruza el papel en dos y mancha en los extremos la madera. Esta es la frontera que os separa, recita. En esta línea nada podrá crecer, es la idea perfecta de una línea divisoria. Vuelve a estirarse hasta el bote y coge una goma de borrar. Con precisión y exactitud realiza dos borrones en la línea de lápiz: uno de ellos en la parte superior del papel y el otro en la parte inferior. Estas serán vuestras únicas comunicaciones, tendréis que elegir subir o bajar si queréis cruzar al otro lado. No estoy a favor de crear un único camino central, no estoy de acuerdo con el centralismo sino con lo extremo. Estas serán vuestras comunicaciones, repite. O subir o bajar. Con el lápiz garabatea una inicial diferente a cada lado de la línea. Estos serán vuestros idiomas, cada uno el suyo. Vosotros utilizaréis diez sonidos vocálicos y vosotros cuatro. Habrá diccionarios de ambas lenguas en todas las bibliotecas. Debajo de cada inicial realiza un símbolo distinto. Estas serán vuestras monedas, dispondréis del dinero directamente sin pasar por ninguna época de intercambios o trueques. Para cruzar la línea tendréis que cambiar vuestras monedas por las otras, a veces saldréis ganando y otras perdiendo. Esto que queda fuera del papel será vuestro abismo, es decir, vuestro océano. La madera es el océano, son dos océanos divididos por una pequeña mancha de grafito. Cada uno podrá explotar sus recursos como mejor le convenga. La frontera sobre las aguas no tiene comunicación, la línea divisoria es imaginaria. Tendréis que ser cuidadosos. A cada lado operarará un sistema telefónico, eléctrico, aéreo, educativo, industrial, agrícola, ganadero, etc. Suena el timbre, se levanta de la silla y se acerca hasta el portero automático. Sí, ahora bajo. Se pone la chaqueta, coge la cartera y las llaves y cierra la puerta. Unas motas de polvo se aceleran bajo la luz del sol, se posan sobre el papel y dan comienzo así las primeras generaciones espontáneas, una a cada lado de la línea.

cita

"Esto del horario de verano es una lata, dijo la mujer. ¿Qué más da?, respondió el hombre. Se hace para ganar horas de luz y ahorrar en electricidad. Ya lo sé, insistió ella, pero es una lata. No sé por qué mañana ha de tener veintitrés horas en lugar de las veinticuatro de siempre. Hoy, la rectificó el hombre. ¿Qué?, le preguntó ella. Hoy, recalcó él, ya estamos en domingo. A partir de las doce de la noche ya se está en el día siguiente. Pues eso, ¿por qué he de perder una hora de mi vida?, prosiguió la mujer. Hay muchas cosas que no entiendo. Él se la quedó mirando. Ya la recuperarás en octubre, dijo. Y además, añadió ella molesta, ¿por qué hay que adelantar el reloj a las dos y no a otra hora?"
Braudel por Braudel (1999) | A. G. Porta

cita

Vera y el Viento
"Me miró a los ojos, calibrando la sinceridad de mi respuesta. Sostuve su mirada. Sus ojos eran hermosos y extraños, con el iris descolorido, como si hubiese visto demasiadas cosas horribles; ojos en lo que parecía latir una tormenta antigua, ya calmada".
Detrás del Hielo (2006) | Marcos Ordóñez

sueños de syl

imágenes de iván

El Personaje

Sally, incrédula, vuelve a mirarse al espejo. Su mano derecha ha desaparecido. Es incorpórea, no está. Lleva cinco minutos frente al espejo, observando cómo su brazo derecho parece bailar una danza macabra, solo, desmembrado, perdido, abandonado a su suerte. Pero lo más raro, lo más desconcertante es que ella siente la mano, se la toca con su mano izquierda, palpando cada dedo, cada cartílago, las uñas sin arreglar, e incluso el anillo de su abuela. Está más que asustada, le invaden sudores, escalofríos, y unas palpitaciones que, hasta entonces, no había sentido. El corazón galopa en su interior con una fuerza insistente y voraz que amenaza con salir disparado. No sabe si es real, si es su mente, ¿será un sueño? Tampoco puede entender que, de manera tan casual, su voz haya cambiado tanto en el trascurso de la mañana. El carisma y la sensualidad de su tono ha pasado a ser un ridículo hilo de voz que hasta ahora había tomado por una leve, aunque no por ello menos alarmante, afonía. ¿Y si llama a Paul? Seguro que él encontrará una razón y la ayudará. Coge el teléfono, Paul responde con un monosílabo y Sally le cuenta, con voz entrecortada su gran desconcierto. Paul, tranquilo, la escucha. Es el más mayor de todos. El más paciente. El que más tiempo lleva.
- Estás desapareciendo.
- ¡¿Qué?!
- Sally, escúchame, estás desapareciendo. Ha llegado el momento. Sabemos que cualquier día nos puede pasar a todos, puede ser que sea durante un día, dos días, una semana, un mes, años, décadas o para siempre. A no ser que Él vuelva a ti, nunca se sabe. Ya sabes cómo funciona, cómo funcionamos. Los personajes inacabados, desmembrados, terminan desapareciendo, no aspiran a la eternidad. Lo siento, Sally, te has quedado sin historia.
- ¡Eso es imposible! ¡No puede ser! ¡Yo era la protagonista! ¡Además, me siento el corazón!.
- Eso no es una razón, Sally, estás a punto...estás a punto de convertirte en... en un personaje desahuciado, te has quedado sin historia. Lo siento, amiga.
Paul guarda silencio durante unos instantes.
- Sabes lo que tienes que hacer, ¿no?
- Sí, creo que sí... ¿pero eso es todo? No me puedo creer que esto sea todo, ¿todo acaba así? Paul, no me digas que todo acaba así...
- Lo siento.No puedo hacer más por ti, Sally.
- Está bien... gracias Paul.
Sally cuelga el teléfono. Se sienta en la cama y se mira en el espejo, cuyo reflejo le devuelve su viva imagen sin mano derecha.
- No puede ser – murmura.

cita

"Lea lo menos que pueda de cosas estético-críticas: o son opiniones partidistas, petrificadas y vaciadas de sentido en su endurecimiento contra la vida, o son hábiles juegos de palabras, en que hoy se saca una opinión y mañana la opuesta. Las obras de arte son de una infinita soledad, y con nada se pueden alcanzar menos que con la crítica. Sólo el amor puede captarlas y retenerlas, y sólo él puede tener razón frente a ellas."
de Cartas a un joven poeta (1903) | Rainer Maria Rilke

cortesías de julia











Estimados señores editores de Austral,
la constante irregularidad que concede la excedencia ha hecho que caiga en mis manos, por el camino prácticamente oficial de préstamo de la biblioteca en la que trabajo, el maravilloso ejemplar que ustedes han publicado en 2010, muy acertadamente como conmemoración a los cien años de la muerte de Tolstói: su edición especial de Ana Karenina.

Sólo unos comentarios con los que, como viene siendo mi costumbre, informo a las editoriales sobre aquellos pequeños errores tipográficos que juego a cazar, como mariposas maltrechas, que hayan superado las correspondientes revisiones:

SEGUNDA PARTE
- Capítulo XII, página 188, línea 34: primera cuestión con los nombres rusos. Aquí el apellido de María aparece con "k" mientras que en anteriores y posteriores ocasiones aparece como "Nicolaevna" con "c".
- Capítulo XIV, página 198, línea 22: Oblonsky visita a Levin y le comenta que va a vender el bosque de "Erguchovo". Más adelante, el topónimo utilizado es "Erguchevo".

CUARTA PARTE
- Capítulo IX, página 472, línea 33: mismo conflicto "Erguchovo".

QUINTA PARTE
- Capítulo XXV, página 634, línea 6: "una" por "unas". (Encontré otra ausencia similar de un plural en algún otro lugar del libro, pero la lectura arrebatada a la que me abandoné me impidió anotar aquélla).
- Capítulo XXIX, página 650, línea 7: aquí el apellido del hijo de Ana, Sergio, aparece como Alejandrovich. Me pregunto si, como en otros pasajes, no debería rezar dicho apellido también como Alexievich.

SEXTA PARTE
- Capítulo XXII, página 767, línea 26: Alexis Alejandrovich no está presente en la reunión, sino que es Vronsky, el otro Alexis. "Alejandrovich" debería ser sustituido por "Constantinovich".

SÉPTIMA PARTE
- Capítulo II, página, 825, línea 5: "Katerina Alejandrovna". Los múltiples nombres de la dulce Kitty (Katia, Kateñka) son variables, lo que me extraña es que aquí aparezca como "Katerina" cuando previamente se nos fue presentada como "Catalina Alejandrovna". Cuestión de traducción, quiero imaginar, pero se echa de menos la coherencia en este sentido, es decir: o siempre Katerina o siempre Catalina.
- Capítulo XIV, página 869, línea 23: "todos" por "todas".

Un verdadero placer releer esta novela de novelas, traída desde el principio del tiempo de todas las mujeres de mi generación, cuando éramos tan soñadoras como trágicas, deseosas de formar parte de una novela, de cualquier novela. La edad revela las verdades, las aposenta. Es éste un libro mayúsculo, sobresaliente. De los que nos sobreviven a todos.

Gratamente agradecida,
Julia

Cortesía de Julia, bibliotecaria de la isla.

cita

"Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos, la edad de la sabiduría, y también de la locura; la época de las creencias y de la incredulidad; la era de la luz y de las tinieblas; la primavera de la esperanza y el invierno de la desperación. Lo poseíamos todo, pero no teníamos nada;"
Historia de Dos Ciudades (1859) | Charles Dickens

sueños de syl

imagen de silvia

Mujer de ojos amarillos, mujer irreal, mujer soñada, mujer perdida, mujer arrodillada, suplicante; mujer espía, mujer-pájaro y mujer pantera; mujer gorda de ojos negros, mujer blanca y mujer negra; mujer artista, mujer cuyo canto atrapa a marineras y pescadoras en su búsqueda de tierras olvidadas, ya perdidas; mujer de libro, de historias contadas, anheladas; mujer ardiente, mujer canalla, mujer de cuadro, dibujada e imaginada, mujer de nadie, mujer mía; mujer que llora porque morirá en mis sueños, mujer que llora porque vivirá, eterna.

[Fundido en negro].